domingo, 5 de octubre de 2008

Epílogo


Ayer fue un día cargado de emociones y también de reencuentro con el mundo real. Siento no haber podido escribir esta entrada pero creía que era algo que no podía hacer con prisa. Primero un breve resumen de la jornada para ir calentando motores.

Dormimos en el albergue del Seminario Menor. Fue el más "caro" de todos, 10€, pero las instalaciones estaban realmente bien. Luis quería quedarse a descansar un poco más y yo bajé a eso de las 10 a callejear por Santiago y hacer algunas compras. Ya había estado en múltiples ocasiones en Santiago pero hoy era especial y apreciaba la ciudad de forma diferente a otras veces. Nunca había caído en la cuenta de la cantidad de tiendas de recuerdos que hay por cerca de la catedral. Es increíble.

A las 11:45 quedé con Luis en la Plaza del Obradoiro para ir a la misa del peregrino a las 12:00h. Entramos en la catedral y estaba todo ya completo. Quizás fue por eso por lo que no viví este momento con la intensidad que esperaba. La verdad es que ya estaba asumiendo que el viaje había finalizado. A pesar de ello varias ocasiones de la misa me parecieron muy emotivas. Varios curas de diferentes países dieron las benciciones a los peregrinos en sus respectivos idiomas. También fueron nombrando las procedencias e inicios de viaje de los peregrinos presentes (los que habían ido a obtener su compostela el día anterior, a nosotros no nos dijeron, claro. Fue un fallo por nuestra parte). Al finalizar la misa una rápida visita al sepulcro del apóstol y dejamos para mejor ocasión el abrazo a la figura del santo para evitar posibles colas en la oficina del peregrino (vivimos a menos de una hora en coche, no tiene mucha importancia). Dicha oficina está en la plaza de la fuente de los caballos haciendo esquina. Ahí nos dieron la Compostela que orgullosos mostramos en la foto (aunque la calidad de la cámara del móvil nos hiciera una mala jugada y parezca que sostenemos folios en blanco).

Para volver a Coruña utilizamos el tren regional. Ya se que pudimos hacer una etapa más y llegar en bicicleta pero el objetivo era llegar a Santiago y conseguido este el nivel de adrenalina había bajado y sinceramente no apetecía en absoluto pedalear una jornada más. No hubo problema para subir con las bicis aunque el "amable" revisor nos recordó que aunque haya sitio para bicis en el primer y último vagón y así esté claramente señalizado en la puerta del mismo sólo deberíamos saber que sólo pueden ir en el último a pesar de que eso no esté escrito en ningún lado.

Resumida nuestra última jornada llega el momento de sacar conclusiones. Lo primero es que la experiencia ha sido extremadamente positiva y que se la recomiendo a todo el mundo. Cuando no has hecho el camino uno piensa en las duras jornadas caminando que tendrán la recompensa de ver ciudades y pueblos con sus distintos monumentos. Lo que uno no se da cuenta hasta que lo ha hecho que el verdadero monumento que uno vera en el camino es la mejor esencia del ser humano.

Y es que el camino es un mundo a parte. Cualquier peregrino que intente sentir el camino intentara sacar lo mejor de uno mismo y ser un poco mejor cada día. En el camino se puede respirar solidaridad y optimismo allí donde uno vaya. Un buen peregrino siempre tendrá una sonrisa y un saludo a tu paso y una mano tendida ante cualquier problema que surja. Ejemplo de ello mi amigo (porque ya lo considero así) Jorge que me sacó del apuro de la bajada de la cruz de ferro. Otra prueba de ello es que en los albergues uno dejaba sus pertenencias toda la tarde encima de la cama. Cualquiera podría haber cogido toda la mochila y llevársela pero no fue así. No dudo que haya ciertos individuos mal intencionados que se alojen también en los albergues y que provoquen que la existencia de un cierto porcentaje de robos pero aún así me ha sorprendido y casi maravillado la honradez con la que todo el mundo parecía querer actuar.

Otra parte esencial del camino son los ánimos que uno recibe de la gente de su entorno. Ese calor lejano que uno recibe de los amigos es otra de las grandes sensaciones que se aprende a valorar de una forma muy especial. Cuando se está lejos de casa se aprecia muchísimo incluso la demostración más pequeña de que alguien se acuerda de ti. Es cierto el refrán de que "Los amigos se ven en las ocasiones" y he tenido la gran suerte de que tuve muchas más buenas sorpresas que triestes decepciones (que por supuesto también hubo alguna).

En el camino da igual la raza, el sexo, la edad, la condición física o la social pues ahí todos somos peregrinos. Ojalá cada uno de nosotros traslade a su vida cotidiana un poquito del sentimiento que hemos aprendido en el camino.

Todo tiene un comienzo y aunque no nos guste también un final. Pero normalmente el final de algo representa también el principio de algo distinto por lo que no tenemos que apenarnos sino coger con ilusión y ganas lo nuevo que comienza. Por eso esto no es un adiós sino un hasta luego.

Ultreia et suseia!

TO BE CONTINUED IN ... http://elcamino2009.blogspot.com

sábado, 4 de octubre de 2008

Una historia por escribir

Todavía no se cuando, no se con quien y ni siquiera se como pero lo que se seguro es que habrá otra historia. Y es que el camino es la droga más maravillosa que puede haber y una vez que la pruebas estás enganchado. Un peregrino es como un ex-fumador. Por mucho tiempo que pase a la primera ocasión que lo tienten volverá al camino y yo lo reconozco. Desde los primeros días el camino me enganchó y ya por siempre seré un peregrino...

Hasta la próxima. Un gran abrazo a todos los que nos habéis seguido durante estas dos maravillosas semanas.

viernes, 3 de octubre de 2008

SANTIAGO!!!

Hoy correspondía poner el título "Etapa 13: Arzúa - Santiago (37 km)" pero dadas las circunstancias me apetecía poner algo más expresivo.
Al final no pude resistir la tentación y fuimos a la plaza del Obradoiro. Estuve un buen rato tirado en medio de contemplando la catedral. Es preciosa. Nunca me lo ha parecido tanto. Gracias a todos los que nos disteis ánimos durante este viaje. Dicho todo esto comencemos con la crónica de la jornada.
El día amaneció totalmente cubierto de niebla. Como estábamos en un albergue privado aprovechamos para salir más tarde y así esperar a que despejara un poco. A las 10 comenzamos nuestro último día de ruta. En mi interior dos fuerzas opuestas: por una parte saber que estás a punto de llegar a la meta soñada hacia que mis fuerzas me permitieran volar sobre la bicicleta; por otra parte también por saber que estás a punto de llegar a la meta soñada sabía que el camino estaba a punto de terminar por lo que cualquier cosa me parecía buena excusa para parar o al menos disminuir la marcha.
La niebla que nos acompañó hasta superar el río Tambre le daba al camino un aire místico y mágico como sí fuera un augurio de que hoy era el gran día.
Los km iban transcurriendo por sendas entre frondosos bosques, a veces de pinos otras de eucaliptos pero siempre acompañados por un sin fin de peregrinos. Ciertamente algunos tramos de esta última etapa parecía el paseo marítimo una tarde soldada de julio (la gente de Coruña sabrán bien a lo que me refiero) sin embargo curiosamente no vimos ningún otro bicigrino. A pesar de ello puse especial énfasis en saludar a cada peregrino que adelantamos. Quizás con eso pretendía transmitirles parte de la emoción que me embargaba paulatinamente a medida que nos acercabamos a nuestra meta.
Tras serpentear a un lado y otro de la general (muy mal por la Xunta por no proveer de pasos subterráneos en todos los cruces con la nacional) llegamos a las inmediaciones del aeropuerto. Un duro ascenso de 2 o 3 km que sin embargo hoy subí como empujado por una fuerza especial, la fuerza que me daba imaginar las torres de la catedral que ya casi podía sentir.
Pasado el aeropuerto un par de rampas y sus correspondientes subidas para llegar al monte del gozo. Antes de ello me equivoqué de camino y de casualidad llegué a las oficinas de mi amigo Marcos donde recogí sus alforjas hace escasamente 3 semanas. Para mis adentros pensé "aquí comenzó todo". Un suspiro, una foto y marcha atrás para volver a localizar las flechas amarillas.
Al pasar el monte del gozo ya se diviso Santiago. Procure no buscar con la mirada las torres de la catedral entre las casas. No quería verlas antes de tiempo, todavía no. Un rápido descenso y ahí estaba el cartel que anuncia el nombre de la población. "Santiago" ponía. En este momento me acorde del letrero que había en Roncesvalles "Santiago 790". Cuanto camino recorrido y ahí estaba, a las puertas de conseguir el reto personal.
A partir de aquí ya no veía las flechas amarillas. Ya había estado en muchas ocasiones en Santiago y mis piernas ya se dirigían solas hacia la catedral, tanto que por constumbre eligieron el camino que baja por las escaleras que llevan al hostal de los reyes católicos. Me eché la bici al hombro para bajar los escalones que eran mi último escollo antes del glorioso momento. Curiosamente en este momento la bicicleta me pareció ligera como una pluma. Al llegar a la plaza fui hasta el centro teniendo cuidado de no girar la cabeza hacia la catedral, deje la bici en el suelo, inspire aire hondo, expire y me volví. Ahí estaba la catedral iluminado por un magnífico sol más magestuosa que nunca. Me tumbé en el suelo y la seguí contemplando inmóvil varios minutos. Hoy la veía absolutamente diferente. Era como sí mi mente percibiera mucho más nítidamente cada detalle, cada tono de color, cada matiz en las figuras. Supongo que más de 700 km esperando este momento habrían entrenado mi mente y mis sentidos de una forma especial.
He de reconocer que por unos momentos pensé en entrar. Era como sí la catedral me estuviera llamando insistentemente. Aún así quería dejar ese momento para la misa del peregrino de mañana, justo antes de recoger el merecido reconocimiento de nuestro esfuerzo: la compostela.
Hoy hemos puesto el penúltimo sello en nuestra credencial en el albergue del Seminario Menor (el último será mañana en la oficina del peregrino). El albergue está muy bien y tiene como principal ventaja estar a 15 minutos andando de la catedral. Mañana dejaremos las bicis y las mochilas aquí mientras vamos a comprar recuerdos y a la misa del peregrino.
Mañana será sin duda un día muy intenso emocionalmente. El fin del camino y la vuelta a la vida real tendrán lugar en escasas horas. No se sí lo he asimilado de momento pues creo que mi mente aún sigue contemplando la fachada de la catedral. Mañana a medida que vayan pasando las horas iré tomando conciencia de todo y espero poder expresar con más claridad todo este vendabal de emociones. Mientras tanto sólo decir por última vez "Buenas noches y buen camino" pues el siguiente post ya lo haré desde Coruña y ahí sí que el camino habrá terminado realmente.
PD.: hoy acompañan este texto dos fotos. En la que estamos Luis y yo es la que consideraré foto "oficial" de este blog. La otra en la que salgo con la camiseta del club la he incluido con especial cariño a mis compañeros del club de ciclismo Riazor que han tenido buena parte de "culpa" de esta aventura. Sí no me hubieran metido en la "locura" de la bici no creo que hubiera vivido nunca esta aventura. Un abrazo para todos vosotros

jueves, 2 de octubre de 2008

Etapa 12: Portomarin - Arzúa (55 km)

Hoy ha sido un día en el que he vivido el espíritu del camino en toda su plenitud. Nos lo hemos tomado con calma desde el principio, hemos hablado con la gente, saludado a todos los peregrinos, degustado una estrella galicia con un madrileño y una alemana... De esta forma los km fueron pasando casi sin darnos cuenta ya que lo que media hoy el progreso de la etapa no era la distancia recorrida sino el número de experiencias acumuladas.
La mañana comenzó oficialmente a las 7:30 cuando encendieron las luces del dormitorio del albergue. No nos dimos prisa en salir ya que todavía era de noche y no queríamos montar las luces en la bicicleta para sólo unos km. De esta forma comenzamos el trayecto a las 8:30. Lo primero tomar otro par de instanteas del impresionante estado del embalse de Portomarín que atravesamos por un estrecho puente peatonal de metal. Luego unas cuestecillas para ir entrando en calor. Por cierto, hoy me dolían las piernas al despertar por lo que por una vez estiré bien y puede que fuera por eso o no pero me encontré bastante bien.
El trayecto fue un 50% asfalto y un 50% corredoira. Constantes subidas y bajadas que no dejaban enfriar las piernas. Lo que sí enfriaba y de que manera era el resto del cuerpo en las bajadas con el aire frío.
En Arzua nos volvieron a rechazar en el albergue público por ser ciclistas. Afortunadamente pocos metros más abajo estaba el albergue privado "da fonte" que fueron 7€ y está mucho mejor que cualquiera público. Como ejemplo las habitaciones son de 4 camas y hoy la tenemos sólo para nosotros 2.
Como veis no ha pasado nada especial, no hemos conocido grandes personajes ni superamos grandes cimas. Sin embargo en mi interior siento que ha sido un gran día, posiblemente el día más "auténtico", cuando más he vivido el camino. Lo malo es que ahora que creo hacer asimilado el verdadero espíritu del camino mañana este llegará a su fin. Pero sólo "este camino". Hay todavía muchos caminos y muchos años por delante. Pero esta es otra historia que ya comentare en el epílogo de este blog.
Mañana sin duda será un día especial. 38 km nos separan de Santiago. 38 km de ver las torres de la catedral. Aún recuerdo cuando una semana antes de emprender esta maravillosa locura fuimos al Decatlhon de Santiago y dije "La próxima vez que vea esta ciudad se me caerán las lágrimas". No se sí esto va a ser así pero mañana lo descubriré.
El plan es llegar a Santiago para comer y aunque estemos ahí evitar acercarnos a la catedral para dejar el gran momento para el sábado a eso de las 11 para asistir a la misa del peregrino a las 12 y dar así por finalizado el reto ... de momento.
No se sí esta noche dormire bien o no. Me estoy autoconvenciendo que el gran día es el sábado a propósito para dormir hoy aunque nadie me conoce mejor que yo mismo y dudo de mis fuerzas para alejarme mañana de la catedral ...
Mañana os lo contaré. Buenas noches y buen camino

miércoles, 1 de octubre de 2008

Etapa 11:Triacastela - Portomarin (49 km)

Quería resumir en una sola palabra esta etapa pero no doy elegido entre dos que la describen perfectamente: "Belleza" o "Galicia". Acaso no sabré elegir porque ambas significan lo mismo?
Y es que desde que entramos a Galicia los trayectos son de una belleza sin igual discurriendo por caminos entre árboles que entrecruzan sus ramas sobre nuestras cabezas, pequeñas aldeas que nos trasladan al pasado, puentes para cruzar una y otra vez los ríos que bordean el camino constantemente. En definitiva, que cualquiera que haga el camino y que haya pasado 2 semanas caminando por Castilla tienen que quedar éxtasiados cuando llegan a Galicia. Dicho esto pasemos a describir un poco la jornada.
Esta noche habíamos parado en un albergue privado. La verdad mucho mejor que uno público aunque faltaba el ambiente de "gran familia" que hay en uno público. Aquí era gente más "fina" que iba a su aire. Como muestra fuimos los únicos que cocinamos nuestra cena, el resto fue a cenar fuera. Pues bien, como la hora de salida del albergue era a las 12 y el día anterior habíamos adelantado 22 km decidimos darnos el gustazo de dormir hasta tarde, hasta las 9, je, je.
Salimos del albergue sobre las 10:30. Justo al final de Triacastela el camino se bifurca a izquierda y derecha. Nosotros cogimos a la derecha pues queríamos ir al monasterio de Samos. Nada más girar una subida por carretera que sí coincidiera a otras horas ni mencionaría pero siendo en el primer minuto de marcha del día me pareció otro Cebreiro. El cansancio se va acumulando y cada día mis piernas tardan más en calentar.
Tras dos o tres km por carretera hay un desvío a la derecha en donde empieza un bello camino típicamente gallego con sus corredoiras, aldeas y vacas. Aunque vuelve a salir a la carretera 4 km más adelante merece la pena cogerlo. Además, a pocos metros de volver a la carretera encontramos otro sendero que ya nos llevará hasta el monasterio.
El monasterio de Samos es de los más importantes y bonitos de Galicia. Sellamos ahí la credencial y nos dijeron que iba a empezar una visita guiada por 3€. Decidimos apuntarnos y no estuvo mal aunque esperaba algo más espectacular. Creo que he visto demasiadas catedrales en los últimos días ...
Continuamos por más sendas en medio de la naturaleza hasta que llegamos a Sarría donde comimos. Al salir del pueblo alguna subida que me tomé con mucha calma al estar haciendo la digestión. Que mal me sienta pedalear después de comer, decididamente para el camino de santiago hay que hacer horario de funcionario, de 8 a 3 y la tarde para descansar.
Continuamos nuestro viaje hasta el destino de hoy, Portomarin. Como seguramente sabreis el antiguo pueblo de Portomarin fue sumergido al hacer un embalse por lo que se construyó uno nuevo más arriba. Incluso la iglesia fue movida piedra a piedra y en alguna de ellas aún se nota la numeración que le pusieron para reconstruirla. Pues bien, quedamos boquiabiertos al ver el embalse casi vacío a emergiendo de él los restos de las casas y calles del antiguo pueblo. La verdad es que no contaba con ver en Galicia un embalse con tan pocas reservas de agua.
En el albergue tuvimos suerte y nos dieron prácticamente las últimas camas. No nos podemos quejar ya que dormiremos en cubierto por 3€ pero es el albergue con menos espacio en el que hemos estado habiendo verdaderos problemas para moverse por la habitación saltando sobre las mochilas de la gente.
Estamos a sólo 92 km de Santiago. El final de la aventura está a la vuelta de la esquina. Ya hemos superado las mayores dificultades y ahora cada metro que recorremos por Galicia se disfruta con un sabor agridulce. Dulce porque es nuestra bella tierra y una maravillosa recompensa a nuestro esfuerzo. Y agrio porque cada metro que recorremos nos acerca al final de esta aventura que hasta ahora sólo ha tenido buenos momentos. Pero ya lo dice el refrán "no llores porque haya terminado, sonríe porque lo has vivido".
No me voy a poner más filosófico hoy que ya habrá ocasión en los próximos días así que mientras no entre por la puerta de mi casa hay camino por lo que tengo que terminar diciendo como siempre ... Buenas noches y buen camino
PD.: este post lo tuve que enviar al día siguiente porque desde el albergue de Portomarin fue imposible hacerlo

martes, 30 de septiembre de 2008

Etapa 10: Ponferrada - Triacastela (72 km)

YA ESTAMOS EN GALICIA!! Y eso significa que el último gran escollo, el Cebreiro, ha sido superado.
La mañana no empezó del todo bien. Luis tenía la rueda trasera pinchada y nuestro único bombin no funcionaba. Tuvimos que buscar la gasolinera más cercana para inflar la rueda y no salimos de Ponferrada hasta las 9:45.
Poco que destacar del camino hasta el Bierzo a parte de que no me notaba al 100% después de la movida jornada de ayer y de no haber dormido demasiado bien. En este trayecto se me pasó varias veces por la cabeza quedarnos en Villafranca del Bierzo y dejar el Cebreiro para mañana. Tras un café y un bollo ya se veía todo de forma diferente y nos lanzamos hacia el Cebreiro no sin antes comprar el último bombin que quedaba en la única tienda de bicicletas de Villafranca.
El camino hacia el Cebreiro es curiosamente llano y lo recorrimos a una media de más de 20 km/h. Transcurre por el arcen de la nacional pero muy bien protegido por una mediana como las de las autopistas.
Durante este tramo conocimos otro de esos personajes que sólo pueden aparecer en el camino. En un momento que dudabamos sí nos equivocaramos de dirección vimos venir hacia nosotros un peregrino de unos 70 años. Cuando le preguntamos sí íbamos bien dijo que sí, que él venía de vuelta. Nos pusimos a hablar y nos contó que se llamaba Máximo y que había hecho el camino del norte y ahora volvía a su casa de Barcelona por el camino francés. Pero este no era su viaje más largo, en el 2000 fuera de Barcelona a Jerusalén andando lo que le llevó 9 meses. Ahora su proyecto era en febrero comenzar la peregrinación a Santiago desde Jerusalén para llegar a la apertura de la puerta santa en 2010. Estuvimos hablando casi media hora durante la cual nos contó unas historias impresionantes. Además nos aconsejó subir por la ruta de bicicletas al Cebreiro.
Tras despedirnos seguimos nuestra aproximación al Cebreiro. Poco a poco íbamos alcanzando los pueblos que tantas veces había leído en la guía: Trabadelo, Valcarce, Ambasmestas, etc. A la par que nos acercabamos iba notando como la adrenalina fluia cada vez más por mi cuerpo haciendo desaparecer todo vestigio de cansancio. Así llegamos al momento de la decisión: la flecha marcaba a la izquierda peregrinos y a la derecha bicigrinos. Aunque días antes estaba decidido a intentar el camino de peregrinos tantas opiniones en contra equilibraban la balanza (de hecho se lo pregunté a propósito a todos los que vi con experiencia y todos fueron unánimes al recomendar subir por carretera). Finalmente fueron estas recientes palabras de Máximo las que nos llevaron a decidirnos: "sí subis por el camino vais a terminar subiendo primero las mochilas y volviendo luego por las bicis". Así pues comenzamos una larga ascensión por asfalto donde el único reto era completarla sin poner pie en tierra. Tengo que reconocer que aunque conseguí ese reto (dejando al lado el tiempo justo de coger un agua fría de una máquina expendedora) hubo varios momentos en los que seguí pedaleando más por honor que por fuerzas. Eché mano del sobre de glucosa que traía como arma secreta y aunque no estoy seguro creo que funcionó.
Tras una hora de duro ascenso llegué al pequeño pueblo del Cebreiro (pueblo por llamarle algo pero no me pareció que hubiera viviendas sino sólo comercio para los peregrinos). Como Luis se había quedado un poco atrás decidí esperarlo ya en tierra gallega de la mejor forma posible, degustando una estrella galicia. Esta es la foto que he escogido para este post.
Luis llegó al cabo de pocos minutos y nos dirigimos al albergue en busca de una merecida ducha. Aquí el primer encontrónazo con na madre tierra gallega. Tras no tener problemas en ningún albergue del camino fue el primero que nos negaron la entrada hasta las 19 por ser ciclistas. Decepcionados decidimos comer y seguir camino hasta Triacastela. Aquí vino nuestra segunda decepción con Galicia. Las indicaciones, aunque suficientes, eran mucho menos numerosas que en otras regiones y en los primeros compases la falta de señales o flechas nos llavaba a dudar de nuestra ruta.
Luego de superar una "pequeña" subida llegamos al alto de San Roque. Faltaban todavía unos 17 km hasta Triacastela y la guía de la Xunta de Galicia que venimos siguiendo indicaba que sólo quedaban bajadas. Pues bien, se olvidaron de una subida en tierra muy dura y bastante larga que entre el cansancio de la mañana y que estaba haciendo la digestión del menú tomado en el Cebreiro hizo que por primera vez en este camino tuviera que rendirme y empujar penosamente la bici durante los últimos 200 metros de subida. Tras ello volvimos a la carretera para emprender una rauda bajada durante unos km hasta que faltaban aproximadamente 7 para Triacastela.
Aquí prestad atención todos los amantes de la bicicleta de montaña. Justo tras los carteles que anuncian el municipio de Triacastela cogimos un desvío a la derecha que nos llevó a una impresionante bajada de 6 km que transcurre por corredoiras, caminos de piedras, otros con charcos y ríachuelos, aldeas típicas pero todo ello con el denominador común de no dar una pedalada ni tocar asfalto en esos 6 km. Junto con la bajada de la cruz de ferro otro punto que tengo que repetir. Eso sí, tras lo de ayer hoy bajé mucho más suave parando incluso a la mitad para dejar enfriar las zapatas y las llantas que quemaban.
En Triacastela el albergue municipal estaba lleno y nos quedamos en uno privado llamado "Berce del camino". Cuesta 7€ y está bastante bien. Recomendable.
No me extenderé hoy tampoco con las conclusiones pues ya tengo ganas de descansar tras el largo día. Sólo decir que hay veces en la vida que uno tiene que seguir su instinto y hacer lo que cree aunque el resto de la gente no este de acuerdo. Puede que no fuera la opción adecuada pero al menos uno quedará en paz consigo mismo por haberlo intentado. Hoy subí por carretera por seguir el consejo del resto del mundo. Puede que nunca sepa sí hubiera sido capaz de subir por el camino y ello será una espina que llevare clavada. Todo por no seguir lo que el corazón me pedía.
En el camino como el la vida cada uno tiene que hacer lo que su interior le dice que es lo correcto. Sí no lo haces no te encontrarás bien contigo mismo y eso es lo peor porque uno mismo es la única persona con la que seguro que tienes que "convivir" toda la vida.
El camino nos enseña muchas cosas. Espero poder aprender las máximas posibles.
Os deseo a todos y todas buenas noches y buen camino.

PD. para Emilio: Sí, dejé mi pequeña piedra en la Cruz de Ferro. Se que debería ser de un tamaño proporcional a mis pecados pero creo que compenso eso con el lastre de las cosas que he traído de más.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Etapa 9: Astorga - Ponferrada (59 km)

Finalmente sí ha sido la dura jornada que se preveía pero no por su exigencia física sino por los imprevistos mecánicos.
Comenzamos el día con un energético desayuno de café, zumo de naranja y churros en un bar cerca del ayuntamiento. Conocedores del duro trayecto cogimos un ritmo suave que nos permitiera ir calentando en la fría mañana de Astorga. Hoy me juré que lo próximo que me compre para la bici será un calientaorejas. Ya se que suena tonto pero hoy casi se me helaron con el gélido aire matutino.
La salida de Astorga está bien señalizada. Rápidamente nos encontramos en un camino de grava que poco a poco fue cogiendo pendiente. Bellísimas las flechas que los peregrinos fueron improvisando con piedras rojas cada pocas decenas de metros.
De esta forma llegamos a una parte donde el camino discurria al lado de la carretera con las montañas al fondo como destino. Mientras el camino fue paralelo a la carretera fuimos por el asfalto para dosificar las fuerzas pero en cuanto se separó ligeramente nos lanzamos ansiosos a él. La ascensión en sí había comenzado. Como el perfil de la etapa asustaba desde un principio subimos con calma pero sin poner pie en tierra.Tras un km o dos encontramos otra vez la carretera con dos claras señales: a los bicigrinos les aconsejaban subir por el asfalto mientras el camino tradicional a pie continuaba de frente. Evidentemente no nos lo pensamos ni un segundo y seguimos por el camino. Poco a poco fueron apareciendo los pueblos que había leído tantas veces en la guía: El Ganso, Rabanal del Camino y Foncebadon (este último de gran belleza). Antes de que nos dieramos cuenta allí estaba la Cruz de Ferro, pequeña en dimensiones pero grande en significado. Nos encontrábamos en uno de los puntos más míticos del camino que antes de comenzar está aventura. La subida había sido mucho más fácil de lo esperado aunque eso no le resto magia al momento. Conocedores de la dificultad de la bajada Luis y yo acordamos hacerla por asfalto y camino respectivamente y vernos en Molinaseca. Así Luis emprendió la bajada por la carretera y yo me quedé un rato más charlando con otros peregrinos y disfustando del momento.
Cuando me dispuse a emprender la bajada comenzó mi víacrucis particular. Aunque antes de salir de Coruña había cargado las cámaras de líquido antipinchazos ahí estaba mi llanta trasera tocando el suelo. "Bueno, la Cruz de Ferro no me ha dado mucha suerte" pensé, pero aún no había nada más que comenzado la racha. Me dispuse a cambiar la cámara por la que había traído de repuesto también con líquido antipinchazos cuando vi sorprendido que estaba pegada a sí misma. Supongo que al meterle el líquido derrame algo por fuera y al traerla plegada se había quedado pegada. Intenté despegarla con cuidado pero sólo conseguí hacerle un 7.
Allí estaba yo con dos cámaras antipinchazos pinchadas. Había que parchear. Como soy previsor antes de salir de casa había comprado líquido de parches nuevo porque sabía que se estropea tras varios meses. Lo que no sabía es que los parches también se deben de estropear porque intenté parchear ambas cámaras sin resultado alguno. Aquí apareció en escena Jorge, un bicigrino madrileño al que le debo la salvación hoy. Amablente me ofreció sus parches (también de decathlon como los míos pero recién comprados) y con ellos parcheé una cámara sin problemas. Cuando vi que no perdía aire le agradeci la ayuda y le dije que ya no hacia falta que demorara más su viaje que ya podía terminar sólo la separación.
Eso creía yo pero no fue así. Mi bombin conseguía dar algo de presión pero llegado a un punto y por mucho que insistieras (sude mucho más aquí que en la subida) no conseguía llegar a la presión necesaria para circular con normalidad. Espere un rato a ver sí aparecía algún bicigrino para pedirle su bombin pero no hubo suerte. Decidí comenzar a bajar andando ya que parado me desesperaba. Para mi sorpresa y alegría al cabo de un km más o menos encontré otra vez a Jorge que había parado a conversar con otros peregrinos. Con su bombin (también de decathlon) conseguí darle presión a la rueda y decidimos hacer la bajada juntos.
Aquí un alto en la historia porque la bajada lo merece. En la guía ya la describian como muy dura y difícil para las bicis. Pues bien, ¡Se quedaban muy cortos! Es con mucho la bajada más impresionante y difícil técnicamente que he hecho y se la recomiendo a cualquier loco de la bicicleta de montaña (y recalco lo de loco).
Ahí estaba yo, después de 5 aburridos días de rectas y llanos ante un desafío de bajada. Está claro que acepte el reto y me lancé a por él. Tenía que ir constantemente parando para esperar por Jorge que bajaba a pie algunos usamos. Yo estaba gozando cada roca, cada grieta y en definitiva cada metro de bajada. Tanto que me olvide que no iba en mi Gary Fisher de doble suspensión sino en una semirígida con 12 kg en las alforjas y claro, sucedió lo que tenía que suceder, escalón brusco y silbido de aire saliendo a borbotones. Había rajado la cubierta y la cámara contra una piedra (cubierta que había comprado 2 días antes del viaje).
Y el tercer "ahí estaba yo" de este post. Ahí estaba yo en medio de la nada con una cubierta rajada y sin cámaras de repuesto. Había que ingeniarselas para poder llegar a Ponferrada que estaba a unos 15 km. Una vez más Jorge me dio sus parches y bombin. Para impedir que la cámara saliera por la raja de la cubierta cogí un block de notas que llevo que tiene las tapas de plástico y utilicé una de ellas para reforzar la parte interior de la cubierta donde estaba la raja. Así conseguí hinchar la rueda lo suficiente para ir con mucho cuidado hasta la carretera más cercana y seguir por ella hasta Ponferrada. Aquí me despedí de jorge y le di mi email para que me enviara unas fotos. Espero que me escriba porque le debo una cena sí viene por coruña.
Entre tanto Luis había llegado a Ponferrada y visto el castillo. Yo llegué al albergue sobre las 5 de la tarde. Tras ducharme fuimos a una tienda de bicis cercana con "modicos" precios que indican que no tiene competencia en el pueblo. Como no era momento de buscar alternativas pagué lo que me pedían por una cubierta, una cámara y unos parches y por fin pude volver a tener la bici en condiciones.
La Cruz de Ferro ha pasado. nuestra idea era haber llegado hoy hasta el Bierzo para atacar mañana la imponente subida al Cebreiro. Desgraciadamente con mis problemas nos hemos quedado a 40 km del comienzo de la subida así que mañana decidiremos sí hacemos la machada y afrontamos la subida tras esos 40 km o bien hacemos una minietapa hasta al Bierzo con lo que tendríamos que pasar toda el día en ese pequeño pueblo.
Aún tendría muchas conclusiones y sensaciones que contaros pero son las 22:50 y ya todo el mundo duerme en la sala. Mejor lo dejamos que mañana será otro día (y espero que con menos imprevistos).
Buenas noches y buen camino

domingo, 28 de septiembre de 2008

Etapa 8: León - Astorga (49 km)

Jornada sencilla físicamente con la cabeza centrada en la Cruz de Ferro.
El día comenzó intentando abandonar León lo que no fue fácil dada la escasa señalización dentro del casco urbano. Finalmente no era tan difícil, bastaba con seguir los letreros a Astorga ya que el camino y la nacional van paralelos prácticamente todo el recorrido.
Durante el trayecto poco que destacar excepto el magestuoso puente de Hospital de Orbigo con el campo de caballeros. Tras el pueblo una bifurcación en la que se podía escoger entre seguir la nacional o por un camino de tierra. Como la guía no destacaba nada de interés durante el camino optamos por seguir la nacional para olvidarnos del traqueteo de los interminables caminos castellanos que llevamos "disfrutando" las últimas jornadas.
Antes de llegar a Astorga un bonito mirador desde el que ya se divisa la catedral y el palacio episcopal. Allí pasamos durante unos minutos a contemplar el paisaje con las montañas al fondo con las que nos enfrentarenos estos días.
Llegamos a Astorga y nos hospedamos en el albergue municipal. Sí el de León lo califiqué de "austero" (por utilizar eufemismos) el de hoy habría que calificarlo de magnífico y absolutamente recomendable. Cocina perfectamente equipada, comedor y sala de estar amplias y literas aparentemente nuevas y cómodas (y por supuesto almohadas). El precio? ajustado, 4€.
Astorga es una villa muy bella. Ya la conocía pero con este día soleado luce especialmente bonita. Visitas obligadas la catedral renacentista y barroca y el palacio episcopal diseñado por Gaudí.
El día de hoy es como sí a un jugador de fútbol a una semana de la final de la copa de europa le preguntan sí está concentrado en el partido que lo enfrenta al colista ese día. Evidentemente con la Cruz de Ferro mañana y el Cebreiro pasado mi mente no le dedicó más que unos segundos a la etapa de hoy. La parte fácil se ha acabado y mañana nos encontraremos con el verdadero camino en todo su esplendor y dureza. La sensación es con el día antes de un examen de oposición. Por una parte estás deseando que llegue pero por otra piensas "sí hubiera tenido unos días más para prepararlo ... ". Las cartas están echadas y habrá que desayunar bien y estar bien concentrado para coger un buen ritmo desde el principio. Ya lo dicen en mi tierra "comeza coma un vello para rematar coma un neno" y eso intentaremos hacer.
Por hoy me despido contemplando la silueta de las montañas desde la muralla de Astorga mientras intentamos adivinar en que cima estará la cruz de ferro.
Sólo me queda por decir ¡Ultreia et Suseia!

sábado, 27 de septiembre de 2008

Etapa 7: Sahagun - León (57 km)

Otra etapa marcada por las interminables rectas en medio de la nada. A 4.5 km de Sahagun está Calzada del Coto. Ahí el camino se bifurca en 2 durante unos 30 km. Se puede elegir entre seguir por asfalto y ver pueblos cada 5-8 km o ir por la calzada romana por un paisaje mucho más solitario. Nosotros como intentamos seguir el camino tradicional cogimos por la calzada romana. Fueron unos 35 km de pista de tierra y piedras con sólo un pueblo en el medio. Poco interés aparte de contemplar una vez más la inmensidad de la llanura castellana y una oportunidad para pensar y encontrarse a uno mismo en la soledad.
Ya en León nos hemos alojado en un albergue de la zona vieja llamado Santa María de Carbajal. Es regentado por religiosas y ello se nota en detalles como que hay salas separadas para hombres y mujeres. En general es muy austero (ni siquiera hay almohadas, los colchones son malísimos y tampoco hay ni cocina ni microondas) pero al menos dan de desayunar y el precio es la voluntad.
Antes de comer paseo por el centro histórico de León. Ya había estado pero hoy con un día soleado me pareció especialmente bonito. Mención aparte merece la catedral cuyo interior me dejó literalmente extasiado. Increíbles vidrieras resplandecientes por el soleado día rivalizaban en belleza con la música del órgano tocado en directo. Todo ello junto con una perfecta iluminación creaba una atmósfera casi mística que hacia sentirte como en una película de espada y brujería.
Mañana última jornada que parece fácil por el perfil. El lunes será la mítica Cruz de Ferro y el martes el inhumano Cebreiro. Espero que estos días de entrenamiento den sus frutos.
PD.: ya que los días anteriores tuve mala cobertura y no pude enviar fotos aunque no es de hoy adjunto la de la cumbre de la cruz de madera que tan dura se me hizo

viernes, 26 de septiembre de 2008

Etapa 6: Carrion de los Condes - Sahagun (39 km)

Hoy ha sido una jornada de descanso activo. Menos de 40 km en llano sin nada que resaltar salvo que marcan el ecuador de nuestro viaje.
Parece que aún no hemos comenzado pero ya van en torno de 350 km recorridos de los 700 que separan nuestro punto de partida,Pamplona, de nuestra ansiada meta. Teniendo en cuenta esto es buen momento para hacer algunas reflexiones.
Lo primero agradeceros a todos los que nos dais ánimos en este blog. Ha sido una grata sorpresa ver que algunos lo seguís con asiduidad y eso hace que escribir estas líneas sea una parte importante del camino.
Lo segundo dar gracias a la suerte, a Dios, a los astros o a quién sea por el magnífico clima que hasta ahora nos ha acompañado todos los días. Las mañanas frías y secas son perfectas para disfrutar del trayecto. Gracias a esto hasta el momento ninguna jornada ha resultado excesivamente complicada lo que supongo que cambiara al acercarse a Galicia con su paisaje mucho más accidentado.
En cuanto a los sentimientos que en mi despierta haber llegado hasta aquí el primero es pena. Pena porque mañana ya llegamos a León y es el primer punto que conozco. Eso hace que sienta como que hoy comienza a terminarse esta aventura. Cierto es que todavía nos puedan algunos de los hitos más míticos del camino como A Cruz de Ferro o la inhumana subida al Cebreiro pero aún así siento como sí esto estuviera próximo al fin y aún me faltara mucha magia del camino por descubrir. Espero que esta segunda mitad sea al menos tan enriquecedora como la primera.
Todo el mundo con el que he hablado que ha hecho el camino ha quedado con ganas de hacerlo otra vez. Es como una droga, pero sana. Y es verdad, aún estamos en la mitad de nuestra aventura y cuando mi cerebro se pone a divagar durante las rectas castellanas me sorprendo pensando en como voy a hacer el siguiente camino.
Mañana nos queda la última etapa en llano. Podíamos hacer más km cada día pero entonces no nos coincidiría parar en lugares grandes para visitar por la tarde.
Hasta mañana. Buenas noches y buen camino.

jueves, 25 de septiembre de 2008

Etapa 5: Burgos - Carrión de los Condes (86 km)

Dicen que el camino es vida pero también es muerte y hoy la hemos visto de cerca. Fue tras pasar el único puerto de montaña en una etapa eminentemente plana, unos km más adelante de Castrojeriz. Comenzabamos la bajada de la cima cuando divisamos un helicóptero de la cruz roja posado al final de la bajada. Un par de médicos atendían a alguien que yacia en la orilla del camino. Cuando llegamos acababan de cubrir su rostro síntoma inequívoco que había ocurrido un fatal desenlace. Un pequeño charco de sangre a pocos centímetros de la cabeza del infortunado peregrino hacia más evidente la tragedia. No nos detuvimos por respeto pero indudablemente este era el tema de conversación de todos los peregrinos en el siguiente cruce de caminos. Estuve charlando con uno de ellos que había compartido cena con el desafortunado peregrino y que se encontraba visiblemente afectado. Según me contó iban juntos hasta la subida donde su desventurado compañero de etapa le dijo que siguiera delante, que él no se encontraba muy bien y que subiría más despacio. Fue la última vez que lo vio con vida. Puede que un desvanecimiento por la tensión, puede que un infarto, el resultado una fatal y desafortunada caída donde debió de golpearse la cabeza con una de las incontables piedras del camino. Desde luego estos sucesos hacen pensar a uno.
A pesar de lo sucedido debemos seguir recorriendo el camino. Como notas más agradables de la etapa nos volvimos a encontrar con una pareja mallorquina que también hace el camino en bici y que conocimos en el albergue de Estella. Rompieron el cambio ayer pero se lo pudieron arreglar en el pueblo más cercano. Nos alcanzaron porque hacen el camino por carretera en los puntos más difíciles. Otro punto interesante de la jornada un belga que hace el camino desde su tierra tirando de una especie de carro hecho de una bici y que según él pesa 80 kg en total.
Por lo que respecta al propio recorrido fue tremendamente aburrido. Largas pistas de tierra planas en medio de la nada. Sólo una subida (la que mencioné antes) y el resto tediosas rectas interminables. Espero que al irse acercando a Galicia el paisaje mejore.
No me voy a extender más porque dentro del albergue no hay cobertura y tendré que salir a la calle para mandar esto (y con el frío que hace).
El camino nos ha enseñado una valiosa lección hoy, que cada uno la intérprete y la aproveche de la mejor forma.
Buenas noches y buen camino

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Etapa 4: Grañón - Burgos (65 km)

El camino nos ha regalado otro día con un clima perfecto y una etapa adecuada a nuestras fuerzas. El día comenzó con un sencillo pero energético desayuno que aproveché convenientemente teniendo en cuenta lo que nos esperaba. Tras él recogí mi ropa del campanario de la iglesia donde la había puesto a secar (ya os comenté que el albergue era peculiar) y partimos hacia Burgos.
La etapa tenía como punto culminante el alto de la pedraja en los montes de oca. Casi una hora de subida en el piñon más grande tras lo que vinieron 6 km de vertiginosa bajada sobre una pista de tierra ancha y lisa con lo que los hicimos en menos de 15 minutos. Allí encontramos un bar donde ya habían parado muchos peregrinos a repostar fuerzas. Fue un bocadillo de jamón (de sólo una loncha) y una cerveza (cruzcampo, lo que faltaba!) pero aún así supo a gloria al estar en el sitio y momento idóneos. Allí conocimos una chica española con su novio holandés que no hablaba una palabra de castellano. Para mi sorpresa me enseñó en su guía que aún nos faltaba un pico por superar el día de hoy justo tras el pueblo de Atapuerca. Yo que creía que los 20 km que faltaban eran llanos ... Efectivamente nos encontramos con una subida no muy larga (200 metros de desnivel en 20 minutos de plato pequeño) pero con un terreno casi lunar. El camino eran rocas sin apenas piedras sueltas pero que formaban constantes escalones que hacían un calvario cada metro que avanzaras encima de la bici. Creo que sí la subida hubieran sido 20 metros más larga hubiera tenido que echar pie a tierra porque con la cumbre en mi punto de mira la terminé más por pundonor que por fuerzas. Como premio final a la subida una gran cruz de madera cuya foto acompaña este post. De ahí a Burgos sólo pistas y carretera sin mucha historia.
En Burgos estamos alojados en el albergue municipal que han inaugurado hace apenas 2 meses. Tiene capacidad para al menos 100 personas pero aún a pesar de ser grande y nuevo carece de los servicios necesarios desde mi punto de vista. Por ejemplo sólo hay duchas en las plantas impares (son 5 pisos), no hay sitio donde dejar las mochilas con lo que puedan ocupando los pasillos, el único electrodoméstico de la "cocina" es un microondas ya que no hay ni cocina ni horno, sólo hay dos lavadoras y una secadora,etc. Es increíble pero a pesar de como era el albergue de Grañón lo cambiaría ahora mismo por este ya que al menos hacían lo que podían dentro de sus posibilidades.
Según la guía que seguimos mañana toca una etapa de 89 km terminando en Carrion de los Condes sin embargo la siguiente es de sólo 40 km. Supongo que esto está echo así para hacer noche en ciudades o pueblos grandes. Sin embargo tras nuestra experiencia de Grañón y Burgos posiblemente optemos por hacer media de ambas etapas y quedarnos en un albergue pequeño. Ya veremos que decide el camino.
Como reflexión del día mencionar unas parejas que conocimos que hacían cada año un trozo del camino (evidentemente no todo el mundo tiene mes y medio de vacaciones para hacerlo). La cuestión es que lo hacen con coche mochilero (amigo que va en coche llevandoles las mochilas) y haciendo noche en hoteles. Está claro que cada uno vive el camino a su manera pero desde mi punto de vista esta gente sólo verá los pueblos, los paisajes y un sin fin de monumentos pero nunca verá el verdadero camino.
Buenas noches y buen camino.
PD.: no se la razón pero desde Burgos estoy teniendo muchos problemas para enviar los post. Ayer no pude y hoy tuve que quitar la foto. Una pena

martes, 23 de septiembre de 2008

Etapa 3: Logroño - Grañón (58 km)

Hoy supongo que es uno de esos días en los que uno descubre porque el camino es diferente y casi místico. Y la razón de está magia no está en los paisajes, ni en los monumentos, ni siquiera en la superación personal. La magia está en las personas que revosan espíritu del camino y uno tiene la suerte de conocer en alguna de las jornadas de la travesía.
Hoy por la mañana conocimos al primero de ellos. Salimos de Logroño y yo buscaba un lugar en la ruta donde desayunar. Cuando nos dimos cuenta ya habíamos salido de la ciudad y mis fuerzas con el estómago vacío comenzaban a flaquear. En ese momento vimos un puesto donde daban pasteles y fruta a los peregrinos. Esta comida me revivió más aún cuando fue acompañada por un trago de caluroso vino moscatel que supo a nectar divino. El artífice de todo esto era Marcelino Lobato Castillo que lleva echos más caminos que años tengo y en sus palabras "ofrece estos alimentos a los peregrinos para devolver al camino parte de lo que ha hecho por él". Marcelino es una de esas personas con una personalidad que te cautiva en sólo unos minutos y que transmite optimismo y solidaridad con tan sólo una mirada.
El segundo personaje que personifica el espíritu del camino es Jose Manuel, hospitalero de Grañón en cuyo albergue parroquial nos quedamos esta noche. Es un sitio muy humilde. No hay lavadora, las colchonetas sustituyen a las camas y hasta carece de agua caliente por una avería en la caldera hace una semana. De todas formas el calor de hogar compensa con creces la falta de otras comodidades. Desde la primera frase Jose Manuel (que pasa sus vacaciones de voluntario regentando este albergue) te hace sentir parte de una gran familia, una familia compuesta por alemanes, coreanos, belgas, franceses y un largo etc. hasta sumar 28 personas entre las que sólo somos 6 españoles. La cena y el desayuno van incluidos en el precio de la estancia que es la voluntad. Eso sí, todo el mundo coopera a pelar patatas, cortar cebolla, poner la mesa o fregar los platos. Después de la cena oración en la capilla (afortunadamente voluntaria).
Podría hablar de la ruta, de sí hubo muchas cuestas, de sí es una etapa difícil, de los monumentos que vimos, de cientos de cosas, pero hoy de lo que quería hablar es de lo realmente importante del camino, la gente que lo vive de verdad.
Ahora os dejo que me toca ayudar a poner los platos para cenar con mi familia multicultural de hoy.
Espero haber sabido transmitiros algo del espíritu del camino que hoy nos envuelve en este albergue pero supongo que no sólo se puede saber sí se ha vivido. El camino no se hace, el camino se vive. Buenas noches y buen camino

lunes, 22 de septiembre de 2008

Etapa 2: Estella - Logroño (51 km)

Pues la previsión del tiempo afortunadamente sigue fallando como una escopeta de feria y hemos tenido otro día perfecto para pedalear. La etapa tuvo cuatro partes muy diferenciadas. Hasta los arcos fue una constante subida por carretera y pistas lisas con lo que se hizo muy llevadero. El segundo cuarto transcurrió por largas pistas de tierra en llano o bajando entre inmensos viñedos lo que nos permitió hacer una media de casi 20 km/h en este trozo. Del tercer cuarto lo único bueno que se puede decir es eso, que sólo fue un cuarto. Constantes repechos infernales seguidos de endiabladas bajadas plagadas de piedras sueltas que nos obligaron a poner pie a tierra y empujar la bici en más de una ocasión. Aquí no creo que fuéramos más rápido que alguien a pie. La última parte del día fue por carretera o pistas circulables sin mayor dificultad. Como hito mítico de esta etapa tenemos la fuente del vino, a pocos km de Estella. Os adjunto una foto de Luis con el vaso de vino en la mano. Creo que esta fuente tenía que estar por la mitad de la etapa. Tras un par de tragos se nos hubiera hecho más llevadero, je,je. También destacar que nada más pasar la fuente uno puede elegir entre dos alternativas para seguir el camino. Íbamos a coger la larga pero un peregrino nos aconsejo coger la otra porque la primera tenía muchos puntos que no podían pasarse con la bici. La verdad es que me quedó pena no haberlo intentado.
De momento el clima está ayudando mucho en nuestro viaje. Creo que hemos acertado con las fechas para coger buen tiempo pero sin calor ni agobios en los albergues.
Al llegar a Logroño nos sorprendimos al ver que hemos coincidido con las fiestas. No es tan bonito como parece porque el día grande fue ayer y hoy toda la ciudad tiene un aire de resaca. El albergue no está mal aunque estamos un poco afinados en las habitaciones. Al menos es barato, sólo 3€. Lo que más nos sorprendió fue al volver de comer encontrarnos a una señora francesa de 68 años que durmió con nosotros ayer en Estella. ¡Hoy ha hecho 50 km ANDANDO! Y por encima dice que para ella es normal. Pensar que a nosotros hacerlos en bicicleta nos pareció suficiente :-(
Por otra parte le estoy viendo los pros y los contras a hacer el camino en bici. Como pros tenemos evitar las ampollas en los pies y que el recorrido se hace más ameno (me imagino lo aburrido que debe de ser una de las rectas de hoy a velocidad de paso). Por contra es que al ir más deprisa que los peregrinos a pie y más despacio que el resto de los bicigrinos (sí, nosotros nos lo tomamos con calma) no coincides dos noches con la misma gente. Esto hace que pierdas el espíritu de hermandad que se fragua entre los peregrinos que comparten las experiencias de su viaje. Por otro lado también nos saltanos algunos detalles del paisaje al pasar desprisa por ellos. Difícil elección, a pie o en bici, creo que el siguiente probaré a hacerlo a pie aunque es muy pronto para pensar en el siguiente.
Un día más quiero daros las gracias a todos y todas los que habéis escrito en este blog. Desde lejos este tipo de cosas se aprecian mucho más de lo que pensaba.
Ahora os dejo que estoy disfrutando de un vino en la plaza principal de Logroño. Hasta mañana y ... ¡Buen camino!

domingo, 21 de septiembre de 2008

Etapa 1:Pamplona - Estella (44 km)

En una sola palabra: PERFECTO. Perfecto el albergue de Pamplona, perfecta la gente que allí nos encontramos, perfecta la cena (Bar La viña en la calle jarrauta), perfecto el clima y perfecta la etapa de hoy.
Parece que hoy todos los santos estuvieron de nuestra parte. Ayer fui a la bendición del peregrino (preciosa y emotiva, y lo más importante en un acto litúrgico, corto) y parece que al menos valió para darnos suerte en este primer día. Pasemos a comentar varios puntos:
LOS PEREGRINOS: Toda la gente que nos hemos encontrado desborda solidaridad, compañerismo y cordialidad. También nos fijamos en que la mayoría de los peregrinos viajan solos y poco a poco van formando grupo al irse encontrando en días sucesivos en diferentes albergues. Por contra los bicigrinos no suelen ir solos. Supongo que por seguridad al tener que vigilar las pertenencias cuando el compañero entre en un supermercado o similar.
EL ALBERGUE: El de Pamplona es nuevo y está muy bien. Aunque es en plan militar (un montón de literas unisex) la amabilidad del resto de peregrinos hacia que no se echará en falta intimidad ni espacio.
LA BICI: Mi fiel Decathlon (bueno, de mi padre, que se la regalé cuando compré la nueva. Papá, gracias por dejarmela traer) se ha portado genial. Lo único que me arrepiento de no haberle puesto los frenos de disco. Hoy me dolían las manos de frenar y las llantas se calentaron tanto que no se podían tocar. Mañana la previsión es lluvia, creo que los voy a echar más de menos.
EL EQUIPAJE: Al contrario de lo que se pudiera pensar el peso de las alforjas se nota más bajando que subiendo. Es verdad que subiendo se hace más esfuerzo pero al fin y al cabo la bici y yo pesamos 93 kg. Los 12 que llevo en total a mayores son sólo un 15% más. Sin embargo a la hora de corregir la trayectoria cuando golpeas una piedra bajando uno está moviendo no los 13 kg normales de la bici sino 25 lo que es prácticamente el doble. Cualquier maniobra hay que acometerla con mucha más precaución que con sólo la bici
EL RECORRIDO: El clima fue muy bueno. Amaneció frío, con mucha niebla y fue despejando poco a poco pero el calor no llegó hasta mediodía cuando ya llegábamos al albergue. Creo que ha merecido la pena venir aunque fuera sólo por las vistas desde el monte del perdón. Cierto es que fue nuestro primer "puerto de montaña" pero aún así el sitio impresiona. Un valle lleno de niebla a tus pies igual que cuando vas en avión (pero pudiendo sacar la cabeza por la ventanilla,je je). Al otro lado todo despejado hasta que la vista alcanza. En definitiva: impresionante. En cuanto a la dureza hay que reconocer que fue fácil. Pensamos en seguir 22 km más hasta los arcos pero como es el primer día tampoco nos quisimos entusiasmar. Mi pie se ha portado bien y afortunadamente pedaleando no me molesta. Andando ya no puedo decir lo mismo pero no es tan importante porque hemos venido a hacer el camino en bici y andaré lo menos posible.
Bueno, pues ahora nos encontramos descansando en la plaza principal de Estella disfustando de una tarde con una temperatura perfecta. Mañana han dado lluvia pero ya no me importa tanto porque el buen recuerdo de este comienzo perfecto del camino ya nadie me lo va a quitar.
Un abrazo muy grande para tod@s los que nos habéis mandado mensajes de ánimo y otro también para los que no lo hayáis hecho pero se que nos apoyais desde la lejanía

sábado, 20 de septiembre de 2008

Etapa 0: Roncesvalles

Hace unos momentos, paseando por Roncesvalles, viendo los peregrinos comenzar su epopeya, el sol aparecer entre la bruma y las montañas empezando a dibujar su silueta tras las nubes matutinas ... hace un momento casi me cae una lágrima de la emoción.
Es una mañana fría pero la ilusión se adivina en la cara de los peregrinos. "venga, que no llegamos a Santiago" apuraba una amiga a otra. Tras meses dudando sí afrontar este reto personal aquí estoy, a 790km de Santiago, pensando en lo que nos espera en las próximas 2 semanas.
Finalmente nuestro punto de partida será Pamplona. Apenas hemos dormido hoy y Luis se encuentra un poco mareado. Ello hace que pensar en volver a dejar el coche a Pamplona y coger un bus para aquí sea una idea que no apetece.
Hoy entraremos en mi primer albergue. Mañana os contaré mis impresiones

viernes, 19 de septiembre de 2008

Etapa -1: La aventura ha comenzado

Ya no hay marcha atrás. Estamos en las afueras de Pamplona descansando en el coche ya que no encontramos ningún hostal abierto a estas horas. No ha sido el único imprevisto pero ya lo contaré en otra ocasión ya que ahora es tarde. Ya puedo decir lo siguiente con propiedad: ULTREIA ET SUSEIA

jueves, 18 de septiembre de 2008

Etapa -2 (cont.): El equipaje


Finalmente ya está todo cargado en la bici. Dios mío! No se que he hecho pero la bici pesa con un camión. Sin embargo todo lo que llevó parece imprescindible para 15 días fuera de casa. Os cuento y ya me diréis en que me he pasado para llevar 11 kg en las alforjas (sin contar con agua ni candados)
ROPA:
-2 camisetas de algodón
-guantes de verano
-guantes de invierno
-6 pares de calcetines (2 altos, 2 bajos y 2 en teoría windproof y waterproof)
-prolongaciones mangas y piernas
-3 camisetas traspirables
-3 maillots (entre ellos uno cortavientos con mangas desmontables y el del club de ciclismo Riazor)
-2 culots
-2 pantalones cortos
-1 pantalón largo
-1 chaqueta de chandal de invierno
-1 polar fino
-1 chuvasquero transpirable
-1 pantalón impermeable
-botas bicicleta
-botas treking
ASEO:
-Cepillo y pasta
-lentillas y líquido
-jabón manos
-gel ducha
-toalla grande tipo balleta
-maquinilla afeitar
-desodorante
BOTIQUIN: (en este apartado reconozco que me he pasado)
-alcohol, agua oxígenada y betadine (todo en botes de 12ml)
-tiritas
-gasas
-venda
-esparadrapo
-paracetamol
-pastillas para la diarrea (por sí acaso)
-crema solar
-pomada rozaduras
-
-
-
OTROS:
-1 candado grande para la bici
-1 candado pequeño para sillin y ruedas
-linterna frontal desmontable (para que valga de linterna)
-bridas y gomas elásticas
-cámara de repuesto, bomba, parches y herramienta (tanto las cámaras de las ruedas como la de repuesto llevan líquido anti pinchazos)
-antena gps y cargador
-móvil y cargador
-boli y block de notas
-guía camino y listado albergues
-gafas de sol con cristales claros y oscuros
-cubrealforjas impermeable
-barritas energéticas y 1 sobre de glucosa
-pastillas para hacer isostar
-piedra de los deseos para dejar en la cruz de ferro (vale, es muy pequeña pero el resto del lastre lo compensa)

En esta lista seguro que no he puesto alguna cosa que llevo pero es bastante detallada. Igual a última hora quito una camiseta, un maillot, un par de calcetines y el polar. Esto puede que sobre pero aún así no se de donde sale tanto peso :-)

Etapa -2: despedidas y mala pata

Hoy es el último día que duermo en casa. Bueno, mejor dicho que me tumbo en mi cama porque tengo asumido que la exitación del viaje hará que duerma bien poco.
Pero vamos a explicar el título de este post. Hoy por unas horas di este viaje por perdido. Sí, estuve a un paso (nunca mejor dicho) de que el destino echara todo por tierra. Hoy bajando para el trabajo torci el pie izquierdo. Casualmente en este pie ya tuve dos esguinces y está muy delicado.Me estuvo dolíendo parte de la mañana y ya daba por perdido. Sin embargo hacia la hora de comer el dolor se fue transformando en cosquilleo y en estos momentos sí no me acuerdo ya no noto nada raro.
Sí mañana no estoy peor saldremos hacia Pamplona sobre las 6 de la tarde en un coche alquilado. La idea es hacer noche en Burgos y el sábado turismo por Roncesvalles. La primera etapa sobre la bici será el domingo. La fecha estimada de llegada a Santiago es el día 4 de octubre.

martes, 16 de septiembre de 2008

As vieiras


Y es que unos peregrinos sin vieiras no son nada. Entre muchas cosas que un turista no se puede perder de Coruña son las marisquerías cercanas a la Plaza de María Pita. Hoy me acerqué a una de ellas y muy amables me dieron estas dos estupendas vieiras. Ahora sólo falta agujerearlas para tener listas nuestras insignias de peregrinos.

lunes, 15 de septiembre de 2008

Agradecimientos para mis compañeros del Club Ciclista Riazor

Aunque en este momento no dispongo de mucho tiempo para escribir acabo de ver en la página del Club Ciclista Riazor (http://www.ccriazor.com) un mensaje de apoyo para mi "aventura". La verdad es que en cierta manera me ha emocionado. No puedo hacer otra cosa que dar mis agradecimientos más sinceros a toda la estupenda gente que forma ese club.

sábado, 13 de septiembre de 2008

Desde el móvil

Buenos días. Hoy voy a escribir la entrada desde el móvil para ir practicando. La verdad es que dadas las limitaciones de mi móvil aún me sorprende lo bien que se navega por internet o lo fácil que se envían emails.

Sólo quedan 5 noches en Coruña y aún me faltan un montón de cosas por preparar y algunas por comprar. A ver sí hoy o mañana hago una prueba a llenar las mochilas con lo que llevare. Aún tengo que comprar los cubre botas y un pantalón impermeable. También tengo que encontrar un par de culots que protejan mis posaderas de tantas horas de viaje. La verdad es que los de Decatlhon no valen para salidas largas.

Ah! Y otra cosa importantísima que aún no tengo: la vieira y la piedra de los deseos para dejar en la cruz de ferro.

Bueno, creo que ya me extendi suficiente para escribir con un N70. Hasta otro día. Ultreia et suseia!

PD.: le doy las gracias a Emilio y a todo el club de ciclismo Riazor por los ánimos que nos envían

viernes, 12 de septiembre de 2008

Seguimos equipándonos


Ya tengo alforjas. Mi buen amigo Marcos me ha dejado sus Topeak DPX. La verdad es que están muy chulas pero me preocupa mucho que no sean impermeables. Entre hoy y mañana intentaré encontrar un buen método para cubrirlas (comprado o "made in feito na casa"). Sino le tengo echado el ojo a unas alforjas Massi CM-222 que hay cerca de mi casa por 52€. Ya os contaré.

jueves, 11 de septiembre de 2008

La ruta



Estos días he estado recopilando la ruta que haremos para el GPS. Llevo un Nokia N70 con un programa llamado SmartComGPS v1.00a y una antena GPS externa bluetooth Woxter BT-Tracer100. No es una tecnología de vanguardia pero espero que haga su labor

Pues bien, aquí os dejo los tracks en formato .plt (creo que de oziexplorer), los jpgs georeferenciados y las conversiones a formato ogf2 para cargar en los dispositivos móviles. También se incluyen una lista de puntos de interés (waypoints).

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Arre borriquita, arre burra arre...


Os presento a mi incansable compañera de viaje (incansable ella, porque yo si que me voy a cansar). Es una Rockrider 5XC comprada en Decatlhon. Me ha dado muy buenos momentos aunque ahora se la he regalado a mi padre que me la deja para este viaje porque la que tengo actualmente con amortiguación doble no se adapta muy bien para llevar las alforjas.

Desde hace unos días he puesto 10kg extras en el transportín (con unos discos de unas mancuernas) para simular el peso de las alforjas. La verdad es que en llano no se nota mucho pero en terrenos pedregosos la bici cambia un 100% con este peso y cuesta un poco hacerse al manejo.

Respecto de la configuración original le he puesto el transportín, pedales automáticos, pedalier Shimano Alivio y un sillín "selle italia gel flow" que aunque pesado (es de los baratos) es muy cómodo para aguantar horas encima de él.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Menos de dos semanas...

Estuve pensando en como comenzar este blog. Lo típico sería "Presentación" o "Érase una vez" pero la verdad es que la frase "menos de dos semanas" es la que no se me quita de la cabeza desde hace días y por tanto merecía el honor de comenzar con ella este blog. Dicho esto pasemos al tipo de comienzo más previsible.

Hagamos una esquemática introducción

1- EL RETO.

Nuestro objetivo será realizar el camino frances desde Roncesvalles (o Pamplona, aún está por decidir) en bicicleta en unos 13 días. Ya se que esto es lo más habitual y no representa nada extraorniario pero cada uno conoce sus posibilidades y a nivel personal representa un reto para nosotros.

2- EL DIA "D"

El día de partida será el próximo día 19 por la tarde. La idea es alquilar un coche desde donde vivimos (Coruña) hasta Pamplona. Si partimos de Roncesvalles uno de nosotros se quedará allí con las bicis mientras el otro va a Pamplona a dejar el coche y regresa en autobús. Si es desde Pamplona será más cómodo. En cualquier caso el verdadero día "D" será el día 21 cuando daremos nuestra primera pedalada en dirección a Santiago

3- LOS PROTAGONISTAS

Aunque hasta hace pocas horas éramos tres para emprender esta aventura hemos sufrido una baja de última hora con lo que sólo seremos dos para afrontar esas duras jornadas de carretera. Por cierto, aún no he dicho nuestros nombres. Soy César y mi compañero de fatigas será Luis.Ambos estamos en la treintena y vivimos en Coruña. Resultad paradójico que nos vayamos a alejar 700km de nuestra casa para volver casi a ella (Santiago está a menos de 70km de aquí).

4- LA HISTORIA

Pues hace escasamente año y unos meses que me volví a subir a una bicicleta desde la adolescencia. Aún recuerdo las primeras pedaladas titubeantes por delante de mi casa volviéndome a encontrar encima de dos ruedas tras no haberlo estado en casi 20 años. La verdad es que fuera de los videojuegos nunca había tenido un hobbie y por ello cogí de tan buen agrado el de la bicicleta de montaña. Aquí le tengo que dar las gracias a mi amigo Marcos que fue quien nos metió el gusanillo de la bici en el cuerpo a Luis y a mi. Él iba a ser el tercer mosquetero de esta historia pero al final se quedará en tierra. Una auténtica lástima.

Pues bien, comencé con una bicicleta prestada por Luis. Aunque el no las utilizaba desde que volvió de inglaterra hace unos 10 años tenía en casa dos bicicletas de montaña (o más bien lo que ahora denominaríamos ciclocross) con las que ambos volvimos a retomar el vicio de las dos ruedas hace poco más de un año. Recuerdo con cariño aquella Gary Fisher que tenía los frenos intercambiados (sí, los ingleses además de circular por la izquierda también tienen los frenos cambiados de lado en las bicicletas).

La verdad es que me gustó mucho la experiencia y me enganchó totalmente. Tanto que al cabo de un mes ya sentí la necesidad de comprar mi propia bici. Comencé con un presupuesto de 200 euros pero poco a poco fui subiendo hasta que me decidí por una Decathlon 5xc de 360 euros. Pensar que en aquel momento me pareció una locura gastar tanto dinero y en menos de un año me compré una Gary Fisher de 1600 euros... Bueno, nadie dijo que tener hobbies sea barato.

También tuve mi época entusiasta en la que me metí en un club de ciclismo, el club de ciclismo Riazor (http://www.ccriazor.com). La verdad es que es gente estupenda y me recibió de una forma inmejorable. Salí con ellos durante unos meses pero con la llegada del verano, un problemilla físico, una época con más vida social y el cambio de horario de las salidas (domingos a las 9h) se me fue haciendo cada vez más dificil seguir su ritmo. De todas formas espero volver a disfrutar de su compañía durante el próximo invierno.

Hace unos tres meses (antes del verano), no se como se me ocurrió proponer hacer el camino de Santiago. La verdad es que lo hice dando por hecho que nadie me iba a apoyar por lo que tampoco sopesé las consecuencias de mi propuesta. El tema es que tanto Luis como Marcos dijeron que sí a la primera. Y allí me encontré yo, pensando en el viejo refrán "por la boca muere el pez". Yo había propuesto ir y aunque en el momento que me di cuenta que igual lo hacíamos me entró el miedo ya no podía echarme atrás. Aún así fue pasando el verano y claro, todos nos relajamos y casi olvidamos el tema. Ya pensé que no íbamos a ir hasta que hace unas semanas volvió a resurgir el tema con fuerza y entonces me dije "Ahora si que no hay marcha atrás. Ya no lo hago por faltar a mi palabra con los demás sino que lo hago por no faltar a mi palabra conmigo mismo".

5- LOS PREPARATIVOS

Bueno, aquí hay que reconocer que más bien pocos, o al menos muchos menos de los que me hubiera gustado. Mis dos acompañantes de viaje son gente que le gusta mucho improvisar y aunque a mi no creía que finalmente no íbamos a ir. Por ello a falta de 11 días para la partida aún nos faltan muchas cosas por comprar. Quiero pensar que lo de ir improvisando algunas cosas durante el camino también nos lo hará vivir con más intensidad. Por el momento no cuento nada más que con el equipamiento habitual de las salidas diarias: culots, mallots, casco, guantes, etc. El transportín y las alforjas espero que me las deje este miércoles un buen amigo que ya ha hecho el camino dos veces (http://aventuracamino.blogspot.com/2007/03/etapa-0-mirando-hacia-adelante.html). Si durante el camino dudamos en algo le preguntaremos a las alforjas que ya son veteranas, je,je,je.

En este apartado agradecería cualquier sugerencia que nos pueda ayudar ya que es uno de los puntos que más dudas me plantea sobre todo teniendo en cuenta la época del año (última semana de septiembre y primera de octubre). Tenía pensado llevar sobretodo ropa más bien de verano (guantes, mallots) pero tengo mis serias dudas. Otro de los puntos es que tipo de cosas considerais imprescindibles que a primera vista igual uno no piensa en ellas. Ya tengo anotados tapones para los oidos y algún tipo de pomada para rozaduras.

6- EL ENTRENAMIENTO

Me hubiera gustado estar mejor entrenado. La verdad es que no le dediqué toda la fuerza de voluntad que hubiera debido pero también tuve mala suerte. Durante el verano me puse en serio en un par de ocasiones pero en ambas cuando llevaba dos semanas de entrenaiento constante primero una fuerte gripe que me tuvo con antibióticos más de una semana y en la segunda una gastroenteritis que me debilitó totalmente echaron por tierra la mejora conseguida en las semanas previas y me cortaron el ritmo y las ganas de seguir entrenando. Ahora llevo tres semanas haciendo bicicleta 6 días a la semana. No le puedo dedicar tanto tiempo como me gustaría así que se basa en salidas cortas de unos 25-30km en llano pero intentando darlo todo consiguiendo medias de unos 22-24km/h. Comentando con otra gente que hizo el camino parece que si esta vez las lesiones y enfermedades me respetan conseguiré llegar al día 19 en una forma más o menos aceptable.

7- EL BLOG DURANTE EL VIAJE

Iré mandando fotos y algún texto espero que todos los días. Supongo que texto más bien poco porque lo haré con mi Nokia N70 y como comprendereis no es nada fácil escribir algo decente con el teclado de un móvil. Gracias a la tarifa de internet de Simyo me saldrá bastante económico mandar un par de fotos y un textito cada día. Espero que me queden fuerzas para poder teclear, je, je. Además llevaré una antena externa GPS con lo que el móvil también nos valdrá para seguir el camino con el Tomtom o con el CompeGPS. Para que os hagais una idea de lo bohemio que es mi compañero de viaje, Luis, no sólo va a ir con una bicicleta de más de 15 años sino que aún se resiste a tener teléfono movil. Voy a ver si lo convenzo para que lleve mi otro móvil durante el viaje por si nos separamos en algún momento.

Despues de este primer post tan denso sólo me queda decir ¡ULTREIA ET SUSEIA!